sábado, 26 de diciembre de 2009

Por qué la teoría de la evolución es verdadera.



El titulo en inglés Por qué la evolución es verdadera es más acorde con lo que nos muestra Coyne en el interior que la traducción española: Por qué la teoría de la evolución es verdadera. Demuestra con múltiples pruebas que la evolución ha sucedido: formas transicionales, órganos vestigiales etc... y múltiples consideraciones sobre lo mal diseñados que están los seres vivos. También habla de la teoría de la evolución, y lo que es más de agradecer, nos explicita lo que dice la teoría, no todos lo hacen.

Lo esencial de la moderna teoría de la evolución, es fácil de entender. Puede resumirse en una sola pero larga frase: La vida en la Tierra ha evolucionado de manera gradual a partir de una especie primitiva(quizá una molécula con capacidad de replicación) que vivió hace más de 3.500 millones de años; luego se fue diversificando a lo largo del tiempo, produciendo muchas especies nuevas y diversas; y el mecanismo de la mayor parte (no la totalidad) del cambio evolutivo es la selección natural.

Cuando este enunciado se divide en sus partes, puede verse que en realidad tiene seis componentes: evolución, gradualismo, ascendencia común, selección natural y mecanismos no selectivos de cambio evolutivo.


(Yo cuento solo cinco con los dedos).

Sobre los mecanismos no selectivos, el más importante según Coyne, y el único que le parece que merece mencionarse en el libro es la deriva genética: que se produzcan simples cambios al azar.

Aunque el título de un capítulo es "Escrito en las rocas", lo que escribe Coyne sobre el registro fósil es escaso, vago y confuso. Su página 54 no haría aprobar un examen a un estudiante de secundaria.

El sectarismo de Coyne alcanza las mayores cotas cuando menciona los embriones de Haeckel. El tipo es capaz de afirmar que más que una falsificación podría tratarse de un error, y que Haeckel fue acusado de forma injusta. Hace falta tener una cara de hormigón, para afirmar eso, pero sin duda el autor la tiene.

Coyne hace otras muchas afirmaciones sorprendentes. Piensa que el "reloj molecular" funciona ¿Ignorancia? No lo creo, simplemente miente porque le parece útil.

Sobre la aparición del vuelo, Coyne como la mayoría cree más probable la teoría"suelo arriba", es decir, se comienza a volar dando saltitos y extendiendo los miembros anteriores, en esto está de acuerdo con Dawkins.


En cuanto a la evolución del ojo, el autor dedica mucho espacio, a los estúpidos y fantasiosos cálculos de Nilsson (según este tipo, un ojo de cámara se fabrica a partir de una rudimentaria mancha ocular en unos 400.000 años, con 1829 pasos)
Y Coyne afirma que "los ojos han evolucionado de manera independiente en al menos cuarenta grupos de animales."

Es difícil saber a lo que se refiere el autor cuando habla de evolución de manera independiente. Todos los grupos tienen un gen común, el pax6, que junto con otros genes forma ojos muy diversos con el mismo programa. Si todos los grupos tienen un programa común y previo a la diversificación de los grupos que fabrica el ojo más adecuado a cada grupo ¿Es licito decir de forma independiente? Para los darwinistas, todo es lícito. Naturalmente, el peje no menciona al pax6, seguramente no le viene bien a sus propósitos.

Tampoco el sujeto dice ni pío sobre los dos mayores cambios evolutivos que se han producido en la Tierra desde la aparición del primer ser vivo. Ha estado hablado sobre diseñadores y no ha tenido tiempo en las trescientas sesenta y tantas páginas.
No menciona el paso de la pequeña célula procariota a la eucariota, la que forma todos los seres pluricelulares, ni habla de la Explosión Cambrica, el cambio evolutivo más sorprendente para todo el que estudia la evolución.

Estas clamorosas omisiones se explican, porque estos datos ciertos, la endosimbiosis y la explosión Cámbrica, no concuerdan con los componentes de la teoría evolutiva que expone al comienzo del libro, estos cambios son enormes, pero nada gradualistas.

Otros darwinistas tratan estos temas de forma superficial, y dan alguna excusa a la endosimbiosis y la explosión, pero normalmente no tienen la desvergüenza de Coyne de omitir cualquier tipo de explicación de estos hechos fundamentales en la evolución, e ignorarlos totalmente.

El libro es un paso más en la deriva irracional de los fundamentalistas darwinistas, que ya, hasta ignoran los hechos más significativos de la evolución.

martes, 22 de diciembre de 2009

Por qué la teoría de la evolución es divertida.




No parece muy inteligente diseñar millones de especies destinadas a extinguirse y ser remplazadas por otras especies parecidas, que en su mayoría también acaban por extinguirse. Los defensores del diseño inteligente nunca han abordado esta dificultad.

Por qué la teoría de la evolución es verdadera
Jerry A. Coyne

Coyne, que acaba de publicar su Why Evolution Is True, que en la traducción española ha mutado en "Por qué la teoría de la evolución es verdadera", es un predicador darwinista filosófico que no se limita a explicarnos la doctrina sino que como buen darwinista aborda otros problemas y da su opinión sobre la extinción de las especies, algo que parece ser, no debería haber permitido un buen diseñador. Parece que para este orate, un buen diseño implica la eternidad. Como todos ellos, diseñadores aficionados nada inteligentes, nos explica que el mundo está muy mal hecho, lo que esperamos sus seguidores es que nos muestre las alternativas. Este, algo insinúa al menos, parece que para un buen diseño según él, es deseable la inmutabilidad eterna.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Doctrina darwinista




Los darwinistas predican mucho pero procuran ocultar lo que afirma la teoría porque se dan cuenta en el fondo de lo ridículas que son sus afirmaciones si se las muestra con claridad.
Ya he repetido alguna vez cual es el contenido informativo de la teoría desprovista de adornos. Puede resumirse así:

El darwinismo nos enseña que una bacteria, aprovechando algunos errores ocasionales que se producen en la copia de su genoma, se puede hacer más apta y adaptada y sobreviviendo y reproduciéndose más que sus colegas con el tiempo llegar a ser un elefante o una almeja. Si tiene pocos errores, o si tiene muchos, eso en realidad no importa, puede ser tan o más apta y estar tan adaptada y reproducirse más o menos y sobrevivir, y seguir siendo una puñetera bacteria por siempre, si no le da por hacerse más grande y pluricelular.


Esta es la doctrina darwinista.
Dawkins afirma:
"Lo que Hoyle y Wickramasinghe no entienden es que el darwinismo no es una teoría de posibilidades aleatorias. Se trata de una teoría de mutación aleatoria más selección natural acumulativa no aleatoria. ¿Por qué razón me pregunto, es tan difícil, incluso para científicos refinados, comprender algo tan sencillo?"

Escalando el monte improbable.

Probablemente Dawkins no es consciente de su estupidez, si lo fuese tendría la respuesta a su pregunta: hay quien tiene un mínimo de sentido común y ve que la frase "selección natural acumulativa"no tiene el menor sentido. Los darwinistas son así con su palabrería, acumulan selección natural o lo que haya que acumular, y ellos en su delirio entienden todo lo que a cualquier persona le parecen desvaríos porque lo son.

lunes, 7 de diciembre de 2009

Azar o diseño




¿Cómo explica el darwinismo la aparición y diversificación de la vida sobre la Tierra?
La explica por azar, y porque algunos seres que son más aptos sobreviven y otros que son menos aptos mueren, en realidad todos mueren, pero los más aptos se han reproducido más antes de morir. La supervivencia de los más aptos, la llaman. Esa es la "explicación" darwinista para la aparición de almejas, sardinas y elefantes sin entrar en detalles, si entramos en ellos la explicación aparece mucho más ridícula.
Como sobre la aparición de la vida las especulaciones son muy vagas, y algunos afirman que son problemas distintos, comencemos la historia con el bicho ya vivo y reproduciéndose.

Al principio fue una bacteria, una célula de pequeño tamaño sin núcleo definido que apareció hace más de tres mil millones de años y se diversificó y de paso en ese periodo de vida exclusivamente bacteriano, que ocupa tres cuartas partes de la historia de la vida, las bacterias cambiaron la Tierra en muchos aspectos que servirán para la vida posterior, por ejemplo produjeron el oxígeno atmosférico.

Un día, no durante cien millones de años ni nada por el estilo, un día, no se sabe muy bien cuando, varias bacterias que llevaban viviendo de forma independiente miles de millones de años, se ensamblaron y formaron una célula mayor y con cualidades muy distintas: la célula eucariota con núcleo diferenciado, esta célula es la que forma parte de todos los seres pluricelulares.
El darwinismo había "explicado"según lo que ellos entienden como una explicación, la aparición de la célula eucariota de otra forma, por la que son capaces de explicarlo todo, la aparición de ojos, pulmones, o cualquier otro adelanto: el azar y la aptitud, la pequeña célula iría haciéndose más apta y llegó a ser una eucariota.
Este descubrimiento del mayor paso evolutivo, no agradó mucho a los darwinistas, por lo que tuvo muchas dificultades para ser aceptado, pero al final ante la evidencia no les quedó otro remedio que aceptarlo a regañadientes, pero siguen afirmando de forma estúpida que ese ensamblaje se produjo por azar porque una célula se comió a otras y comenzaron a funcionar conjuntamente, algo así como si un hombre se comiera un caballo y surgiera un centauro.
Por mucho azar y mucha comilona, ellos saben que eso es absurdo, que dos sistemas complejísimos que funcionan de forma independiente, no se pueden fusionan por azar y así adquirieren nuevas cualidades.

La célula se fue haciendo más apta y adaptada y se agrupó con otras y aparecieron almejas y elefantes. La explicación darwinista es clarísima: se producen algunos errores en la copia del genoma de la célula, y esta aprovecha algunos de esos errores, se hace más apta y adaptada a los diversos medios y así poco a poco y dándole tiempo al tiempo llega a ser un elefante o una almeja, según esos errores azarosos emprendan el camino de formar un bivalvo o un cuadrúpedo con trompa y cola. Como vemos las palabras clave son apto y adaptado ¿Hay alguna forma de medir la aptitud o la adaptación? Sí, contesta el neodarwinismo, los que más se reproducen son más aptos.
Esto haría suponer que los seres vivos se reproducirían cada vez más rápido, aumentando su aptitud y adaptación, pero lo que sucede es todo lo contrario. La bacteria primigenia se reproduce por billones en días mientras que sus sucesores evolutivos las almejas, las sardinas y los elefantes tardan mucho más y de cualquier forma que se pueda imaginar medir la aptitud y la adaptación, la bacteria es más apta y adaptada que sus descendientes evolutivos.

Estas enormes contradicciones lógicas que incomodarían a cualquier persona, no hacen mella en los creyentes darwinistas. Nada hace mella en ellos, esta religión materialista produce un tipo de demencia muy característica como podemos observar en los predicadores de este blog y que divierte a los observadores externos.

Estos absurdos milagros evolutivos eran explicados antes porque dado la enorme cantidad de tiempo disponible todo es posible, pero ahora ya no necesitan ni eso, han entrado en en un estado de irracionalidad sin límites. Los más perturbados que son los que se arriman a este rincón explican la aparición de todos los diseños animales con sus características en un instante geológico sin antecedes fósiles divergentes en la explosión Cámbrica y ni siquiera ven el problema que supone, que el azar tiene unas reglas y que los infinitos milagros estadísticos que exigen no hacen sino aumentar al disminuir el tiempo.

domingo, 29 de noviembre de 2009

Revolucionarios y diplomaticos



Como bien afirma el Naturalista Revolucionario , el darwinismo es incompatible con cualquier tipo de religión o de filosofía que no sea totalmente materialista. El cumplimiento del programa máximo impedirá cualquier desvío por muy pequeño que sea del más estricto materialismo filosófico en la enseñanza y en el debate público. El materialismo científico (ahora darwinista, no marxista) debe ser impuesto por decreto, con el razonable argumento de que lo que no se atenga a este materialismo, hará recaer a la humanidad en el animismo y la superstición lo que acarreará enormes males.
Esto anterior es tan cierto como que que el cumplimiento de este programa no es posible en las actuales circunstancias en Estados Unidos ni en Europa, y que la saña con que se ataca cualquier, no ya disidencia, sino una no absoluta sumisión al programa llama la atención a personas que están al margen de estas polémicas.

La afirmación de Robredo:Enseñar la controversia"no es libertad sino abuso infantil, no deja indiferente a quien la lee y nos hace ver hasta que punto el materialismo científista es totalitario.
Otras "anécdotas"como la protesta de Pinker por el nombramiento de Francis Collins para dirigir los NIH por haber manifestado que era cristiano, dejan sorprendidos a mucha gente que no pensaba que habíamos llegado tan lejos.

En mi opinión Robredo y otros de su estilo pecan de izquierdismo ingenuo y no favorecen, afortunadamente el triunfo de la Revolución Naturalista destapando claramente unas intenciones que permanecen más ocultas en otros a los que llama diplomáticos y "compatibilistas".

Uno de los más conspicuos representantes de esta postura diplomática, Francisco J Ayala, pope darwinista moderado, no es partidario aparentemente del ataque directo y feroz a la religión, solo ataca con verdadera saña al Diseño Inteligente. Podemos permitir la religión, afirma, pero no que se hable o se postule de alguna de inteligencia en el Universo y que esta pueda manifestarse de alguna forma en la vida. Adentrándose inevitablemente en la teodicea, como Dawkins y otros tantos, quizás recordando sus tiempos de fraile antes que cocinero, el moderado Ayala desbarra de forma ridícula cuando llega a afirmar que Dios ama más a los pulpos y los calmares que a los humanos porque según este orate, los ojos de los cefalópodos tienen un mejor diseño, o cuando afirma que la teoría neodarwinista está más demostrada que la teoría heliocéntrica, que afirma que la Tierra gira alrededor del Sol.

Tanto revolucionarios permanentes, como moderados diplomáticos en mi opinión hacen ver con tanto dislate a cualquiera que pase por ahí, que existe una enorme y en cierto modo misteriosa anomalía en esa visión cientifista que solo puede ser ocultada con exabruptos, griterío, o apelando a la censura.

domingo, 22 de noviembre de 2009

¿Cómo podría falsarse la teoría darwinista?




¿Cómo podría falsarse la doctrina darwinista? Como todo el mundo sabe, (hoy son popperianos hasta los jueces de línea) si una proposición no tiene posibilidad de falsación no es científica. Y una teoría que se pretenda científica debe expresar claramente como podría realizarse su falsación, que datos empiricos harían insostenible la doctrina.

El darwinismo como teoría es absolutamente irrefutable, dado que no tiene ningún valor predictivo y cualquier dato y su contrario encajan siempre perfectamente en la teoría.
Popper afirma reiteradamente con mucha razón que la única predicción de la doctrina, dados sus mecanismos evolutivos es el gradualismo. Los darwinistas ignoran que el gradualismo no es sostenible cuando los grandes cambios evolutivos se producen en un instante geológico.
Antes la explosión Cámbrica suponía un cierto problema para la doctrina, eso era cuando los datos no eran tan malos para los doctrinarios, cuando el avance de la ciencia nos hace ver lo rápida de esta explosión, los doctrinarios se lían la manta a la cabeza y farfullan algunas excusas: que si una bola de nieve, que si aumenta la presión de selección y eso hace que aparezcan todos los phyla animales con sus caracteristicas ya definidas, y otras fantasías realmente ridículas.

Dejemos aparte que el darwinismo ha sido falsado en cuanto su escaso valor predictivo lo permitía.
Dejemos aparte la explosión Cámbrica, que ya es dejar, y preguntemos a los creyentes darwinistas.

¿Cómo podría falsarse el darwinismo? Algunos ilustres kapos como G G Simpson y Maynard Smith, ya han manifestado como se podría: si apareciese un conejo o un elefante precámbico el darwinismo quedaría falsado.
En realidad estos trileros intelectuales pretenden identificar el hecho evolutivo con la estúpida teoría. Si apareciesen conejos, almejas y elefantes precámbricos, lo que se pondría en cuestión es el hecho evolutivo en si. Para mí como para tantos, es absolutamente improbable que eso suceda, y si esa condición tan absurda es necesaria para poder falsar la teoría, eso nos dice mucho del mínimo valor científico de la basura darwinista.

Supongo que los darwinistas que por aquí vienen tendrán una opinión razonable de como podría falsarse la teoría, si no se explica como puede falsarse no es científica.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Reflexiones de un sabio

Estas reflexiones de un gran biólogo, un verdadero sabio, que fue presidente de la Academia Francesa de Ciencias, y durante su larga vida no dejó de reflexionar sobre la evolución biológica, no han perdido actualidad aunque hayan pasado treinta años. El obstáculo que la ideología darwinista supone para el avance de la ciencia persiste como entonces. Hace muchos años que leí este libro, y algunas reflexiones a las que yo pensaba que había llegado independientemente, tienen sin duda el origen en estas lecturas cuyo contenido había olvidado aparentemente.






Las interpretaciones de los hechos evolutivos.

Constatamos no sin sorpresa, que las teorías que explican actualmente la evolución descansan sobre los mismos principios que las del pasado. A pesar de ello no han disminuido en absoluto las pretensiones de sus partidarios, sino todo lo contrario, y muchos biólogos anglosajones e incluso franceses escriben sin vacilación que el mecanismo de la evolución es conocido con toda precisión y certeza; tal es su fe en la doctrina. Se ha pasado del darwinismo al neodarwinismo y recientemente al ultradarwinismo, que pretende ser no solo el depositario exclusivo de la verdad en materia de evolución, sino incluso de la evolución misma; resulta pues vana toda discusión con sus partidarios.


El ultradarwinismo actual, que pretende estar en posesión de la verdad, engaña a los biólogos deficientemente informados, les extravía y les inspira interpretaciones erróneas.

He aquí un ejemplo tomado al azar de una lectura: "Entre los microorganismos, el tiempo de generación es corto y el tamaño de la población es enorme. Por consiguiente, la mutación actúa como un proceso de evolución muy potente en periodos de tiempo más breves que en una población de organismos superiores" P R Lewin 1969

Este texto da claramente a entender que las bacterias actuales evolucionan muy rápidamente gracias a sus innumerables mutaciones. Pero eso no es cierto: desde hace milenios, incluso miles de millones de años, las bacterias no se han despegado de su cuadro estructural, dentro del del que han fluctuado y continúan haciéndolo. Por supuesto, en los cultivos, el microbiólogo ve las especies bacterianas oscilar en torno a una forma media, pero esta constatación no autoriza a Levine a confundir dos fenómenos diferentes, como son la variación del código genético por copiado erroneo del DNA y la evolución. Variar es una cosa, evolucionar es otra; no nos cansaremos de repetirlo.

A golpe de dobles postulados, de extrapolaciones temerarias- si no ilegítimas-, se crea y se instala una seudociencia en el corazón mismo de la biología, induciendo a error a muchos bioquímicos y biólogos que de buena fe, creen demostrar la exactitud de nociones fundamentales que de hecho no lo son.

Los bioquímicos y biólogos que se adhieren con los ojos cerrados a la doctrina darwinista se esfuerzan por hacer corresponder con ella los resultados de sus trabajos, y orientan en consecuencia, sus investigaciones, ya se refieran a la ecología, la etología, la sociología, la dinámica de poblaciones, la genética o la paleontología... Esta intrusión de la teoría tiene tres efectos inoportunos: priva de objetividad a las observaciones y las experiencias, las hace parciales y, lo que es más grave, engendra falsos problemas.

Evolución de lo Viviente. Pierre P Grassé.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Sin rastro




Hay actualmente una serie de problemas planteados a la visión darwinista de la evolución que en mi opinión no tienen solución de ningún modo desde la perspectiva de la doctrina. Los doctrinarios no quieren siquiera ver estos problemas o los zanjan con alguna frase hecha.

Al insoluble problema de la Explosión Cambrica y a la del patrón de la aparición de la información genética sustantiva y a otros, se añade el de la desaparición sin dejar rastro de los precursores biológicos de la célula. La respuesta de los dogmáticos es muy simple han desaparecido porque se los han comido sus sucesores más evolucionados. Los sucesores más evolucionados no se han comido a las primeras células sino que estas procariotas llenan la biosfera. Sampedro se plantea honradamente esta extraña desaparición, pues cabría encontrarlos por todas partes.

Si la primera célula, seguramente una bacteria, se formó en la Tierra a partir de la materia inerte, es obvio que no pudo hacerlo de un solo paso. Debió haber numerosos intermediarios. Y si fue así, ¿dónde están sus herederos? Los resultados de miles de millones de ensayos para construir uan bacteria. Los titubeos, las vacilaciones, las salidas en falso. La inmensa mayoría murieron sin dejar descendencia, por supuesto, pero ¿alguien se habría atrevido a predecir, a deducir de lo principios darwinianos que solo habría un ganador de ese proceso? ¿Que una única célula bacteriana, surgida de la sopa química primordial, sí, pero dotada de toda la desesperante complejidad de cualquier célula por simple que ésta sea, iba a dar lugar a todos los seres vivos que existen actualmente y a todos los que ya han dejado de existir en este duro mundo de fiera competencia y flaca memoria?

Una solución simple puede muy bien ser única: cualquier instrumento que sirva para comer sopa debe tener la forma aproximada de una cuchara. Pero a nadie se le ocurre que una solución compleja pueda ser única. No puede haber una sola forma de organizar el tráfico en una ciudad de tres millones de habitantes, como no puede una sola forma de analizar la historia del arte, ni de escribir una novela policíaca en la que el asesino resulte ser el narrador. Ni siquiera Bill Gates debe estar convencido de que Windons es el único sistema operativo capaz de hacer funcionar un ordenador. Los problemas complejos siempre tienen numerosísimas soluciones.

¿Dónde están las otras soluciones para generar vida a partir de la materia inerte? Cabría encontrarlas por todas partes, por mucho que, según nuestros criterios antropocéntricos, resultaran menos brillantes, menos compactas o menos evolucionables que la solución que la solución que acabó generándonos a nosotros.

Pero el caso es que no es así. Todas las malditas células que constituyen su cerebro, lector, todas las malditas células que forman el hígado de un camello, todas las que conforman el ala de una mariposa y todas las condenadas que hay en el mundo descienden evidentemente de la misma Eva, de la única madre de todas las células. ¿No es esto sorprendente? Yo creo que es extraordinariamente sorprendente. Y sin embargo no hay la menor duda de que esto es así.


Deconstruyendo a Darwin. Javier Sampedro.

lunes, 26 de octubre de 2009

Ciento volando


El darwinismo es un ejercicio constante de imaginación que pretende pasar por ciencia. Le llaman hipótesis a las más desbordadas fantasías. Estos párrafos del predicador Dawkins, creo que nos muestran claramente como cualquier chifladura es una hipótesis plausible con solo imaginarla.

He aquí una hipótesis acerca de los orígenes del vuelo de las aves.
El antepasado hipotético, que podemos imaginar como un dinosaurio pequeño y ágil, corre rápidamente tras los insectos, saltando en el aire con sus potentes patas traseras y mordisqueando las presas. Los insectos habían desarrollado la capacidad de vuelo mucho antes. Un insecto volador es capaz de emprender una acción evasiva, y el depredador saltarín podría sacar partido de la capacidad de corregir su trayectoria en pleno salto. Los gatos pueden hacer esto hasta cierto punto. Parece difícil porque al estar en el aire, no hay nada sólido contra lo que empujar. El truco consiste en modificar el centro de gravedad, y esto puede hacerse desplazando partes de uno mismo en relación a otras partes. Se puede mover la cabeza o la cola, pero las partes desplazables más obvias son los brazos. Ahora bien, una vez los brazos se desplazan con este fin, se harán más efectivos si desarrollan superficies para captar el aire. También se ha sugerido que las plumas alargadas de los brazos se desarrollaron como una especie de red para capturar insectos. Esto no es tan forzado como parece, pues algunos murciélagos utilizan sus alas de esa manera.
Si se la compara con la teoría del planeo de árbol en árbol, la teoría de la carrera, el salto y la corrección de la trayectoria en el aire invierte el orden de las cosas. En la teoría del planeo la función de las protoalas era proporcionar fuerza ascensional. La belleza de esta teoría reside en el hecho de que los mismos circuitos nerviosos que habrían servido para controlar el centro de gravedad que el antepasado saltador habrían servido también, sin apenas cambios, para controlar las superficies de vuelo en una etapa posterior. Quizá las aves empezaron a volar a partir de saltos desde el suelo, a diferencia de los murciélagos, que habrían comenzado planeando de árbol en árbol. Pero tampoco puede descartarse que las aves empezaran también planeando de árbol a árbol.
El debate sigue.

Escalando el monte improbable. Richard Dawkins.

Dawkins pretende demostrarnos que un gato puede adquirir alas, con el tiempo, saltando y sobreviviendo.
Para mi estos textos son un test. Quien no suelte una carcajada o al menos esboce una sonrisa leyendo esto, es un fanático o un fantasioso, o ambas cosas como es más frecuente. El debate sigue.

martes, 20 de octubre de 2009

Para ser darwinista, hay que creer en infinitos milagros



El darwinismo afirma que los murciélagos evolucionaron de un pequeño mamífero parecido a un ratón que tenía cuatro patitas, cuando por azar se produjo un error en la copia del genoma, las patas delanteras de alguno de ellos se trasformaron en una extremidad prealar, una mezcla de pata y ala. Ese cambio genético se extendió por una población (esta extensión de esa característica a toda una población es un milagro estadístico de los muchos que exige la doctrina pero no lo tendremos en cuenta, porque tendremos otros innumerables milagros).

Los "ratoncitos" de los que divergieron estos premurciélagos con sus muñones prealados seguían siendo aptos y adaptados y los premurciélagos también naturalmente.
Posteriormente a estos premurciélagos divergentes, a uno de ellos solo, por casualidad se le produjo otra mutación en la que el muñón prealado comenzó a parecerse más a un ala que a una pata y esta mutación se fue extendiendo por una población de esa especie premurciélaga que muy probablemente tuvo que adoptar la posición bípeda después de una serie de estas milagrosas mutaciones que afectaban a los miembros anteriores, cuando ya el miembro era más ala que pata pero aún no permitía volar. ¿Cuántas de estas mutaciones azarosas y milagrosas, todas en la misma dirección, afectando a los miembros anteriores del "ratoncito" serían necesarias para que este pudiese volar? ¿Diez docenas? ¿Cuántos cambios en la musculatura y en el resto del organismo son necesarios para adaptar a un animal al vuelo? Naturalmente el premurciélago era apto y adaptado en todas sus formas intermedias, sin pata-pata ni ala-ala sino con una pata-ala que probablemente en un tiempo no le servía para andar ni para volar pero no por por eso le iba a hacer menos apto ni adaptado.

Lo malo de los cuentos darwinistas es que no entran en detalles, cuando precisamente estos detalles siempre son lo más divertido. Pero su religión no les permite hacer cuentas, les ordena repetir los mantras aceptados y esconder la cabeza como el avestruz.


Hasta hace muy poco no eran conscientes de que tenían un público expectante y divertido que espera sus ocurrencias y nos contaban cosas como estas. Ahora se tientan la ropa antes de hablar si no es dentro de la secta y en general permanecen callados, pero eso sí, siguen creyendo en los infinitos milagros aunque no se atrevan a exponerlos con claridad.

Como le decía la Reina Roja a Alicia, es posible creer tres cosas imposibles antes de desayunar, solo es cuestión de acostumbrarse, y los darwinistas están acostumbrados ¡Vaya si están acostumbrados!

sábado, 17 de octubre de 2009

Absurda censura



Donald Williamson, con el patrocinio de Lynn Margulis intentaba publicar en PNAS (Proceedings of the Nacional Academy of Sciences of the Unites States of America) un artículo titulado: Las orugas han evolucionado de onicóforos por hibridogénesis.
Se habían cumplido todos los protocolos, el artículo había sido revisado y publicado en on line, sin embargo, el fanatismo darwinista no ha podido soportar el cuestionamiento del dogma, y se ha censurado su publicación impresa.

Williamson propone como hipótesis que las mariposas son el resultado del cruzamiento de dos especies distintas una con la forma de sus larvas (orugas) y otra con su forma adulta. La metamorfosis de las mariposas sería el resultado del cruce de estas dos especies tan diversas y no la evolución a partir de una única especie antecesora, como proclama el neodarwinismo.
Williamson propone para validar o falsar su hipótesis, el estudio del genoma de los lepidoptera. Si su teoría es válida aparecerán dos juegos detectables y diferenciados de genes, uno formado por genes de los gusanos onicóforos, que sería responsable de la morfología y la fisiología larval, y otro como el de los insectos, que se expresa secuencialmente y codifica las proteínas de la fase adulta. Por el contrario los insectos que no pasan por fase de oruga carecerían de ese primer juego de genes.

Romper todas las reglas para evitar la publicación ha sido en mi opinión un grave error, la táctica darwinista ha sido hasta ahora dejar pasar estas cuestiones, simplemente ignorarlas, por supuesto censura previa, pero si por cualquier causa esta es burlada, con no hacerle caso bastaba. La cantidad de información es tan enorme que normalmente estas cosas pasan desapercibidas.

Pero enfrentarse con Margulis es una enorme metedura de pata, ella es la representación viva del avance de la ciencia contra al dogmatismo al que vence a pesar de los grandes obstáculos que tiene que sortear. Todos estos darwinistas la odian, no tienen más remedio que reconocer que la teoría endosimbiotica es genial, pero no soportan que se ría del neodarwinismo. Si estuviesen seguros que la hipótesis es absurda, no tendrían más que esperar la fácil falsación propuesta en el artículo y Margulis perdería parte de su prestigio, pero creo que tienen miedo, mucho miedo y eso les ha llevado a este gran error.
Se están comportando como los que se negaban a mirar por el telescopio de Galileo porque era imposible que Júpiter tuviese satélites.

Finalmente se impuso la razón y se publicó, pero ha quedado claro el afán censor de los fanáticos darwinistas. Lo siento Margulis, decía este. 7-12-09

martes, 6 de octubre de 2009

Un compromiso absoluto con el materialismo




Nos ponemos del lado de la ciencia a pesar de lo patentemente absurdo de algunos de sus conceptos, a pesar de su fracaso en cumplir muchas de sus extravagantes promesas de vida y salud, a pesar de la tolerancia de la comunidad científica a historias ad-hoc sin fundamento, porque tenemos un compromiso anterior, un compromiso con el materialismo. No es que los métodos y las instituciones de la ciencia nos obliguen a aceptar una explicación materialista del mundo fenomenológico, sino, por el contrario, que nosotros estamos forzados por nuestra adherencia a priori a las causas materiales para crear un aparato de investigación y una serie de conceptos que producen explicaciones materialistas sin importar qué tanto vayan en contra de la intuición, sin importar qué tan místicas sean para el que no ha sido iniciado. Más allá de eso, el materialismo es un absoluto, pues no podemos dejar que un Pie Divino cruce la puerta.


El famoso biólogo Richard Lewontin nos aclara en este párrafo de Billions and Billions of Demon la verdadera intención y métodos de los materialistas-darwinistas, que anteponen radicalmente su filosofía materialista a cualquier principio científico. Está claro por el contexto que lo que defiende con uñas y dientes no es la ciencia como pretende, es la filosofía materialista que quiere hacer pasar por tal. El materialismo es un absoluto para ellos y lucharán con uñas y dientes para mantenerlo, todo está permitido, incluso la mentira. Pero el materialismo no solo no es obligatorio, es que está condenado al fracaso ante el avance del conocimiento que nos muestra una inteligencia en el Universo, pues con ese avance vemos que la vida es siempre más compleja no solo de lo que imaginan los materialistas sino de lo que puedan imaginar jamás, e incompatible con las fantasías azarosas.

viernes, 2 de octubre de 2009

Cuando la ciencia avanza el darwinismo retrocede





En enero de 2002 un equipo de investigadores presentó en Nature los resultados de la primera búsqueda sistemática de maquinas multiproteicas. Este equipo dirigido por Giulio Superti-Furga, analizó de un golpe unos 1400 genes (una tercera parte del genoma) de la levadura Saccharomyces cerevisiae.
El resultado fue una de las mayores sorpresas científicas de los últimos años: las 1400 proteínas fabricadas por esos 1400 genes no vagan en solitario por la célula, cada una aportando su pequeña cuota de know how a la empresa celular, sino que todas están formando parte de máquinas multiproteicas [...]Cuando los científicos de Heidelberg representaron en un solo mapa todas las interacciones, descubrieron un hecho inesperado más: la mayoría de las máquinas están asociadas entre sí, directa o indirectamente, a través de proteínas comunes."En una primera aproximación toda la célula es una sola máquina".



La organización de la célula en máquinas altísimamente estructuradas supone una enorme restricción a los mecanismos evolutivos concebibles. En palabras de Superti-Furga:"Las levaduras y las células humanas comparten un altísimo número de máquinas similares, compuestas por proteinas relacionadas. Esto significa que mientras cada proteína ha cambiado significativamente a través de mutaciones en el curso de la evolución, las células de las nuevas especies siguen construyendo los mismos tipos de máquinas, usando para ello los componentes alterados". Las graduales sustituciones de letras en el ADN, que van alterando poco a poco la secuencia de aminoácidos de una proteína - y que siempre ha hecho las delicias de los darwinistas ortodoxos- parecen ahora menos relevantes que nunca para la generación de la novedad evolutiva.

En el seno de una máquina multiproteica, las lentas variaciones de una proteína tienen que venir compensadas por la alteración de la proteína de al lado, de modo que la interacción entre las dos proteínas se mantenga y la máquina no se deshaga en pedazos. Si todas las células eucariotas están basadas en máquinas multiproteicas complejas, ajustadas y engrasadas, y si esas máquinas son en gran medida las mismas en todas las especies animales, lo más probable es que la materia prima de la innovación evolutiva no sea el gen , en su constante fluir acumulativo de cambios de aminoácidos, sino la máquina en su conjunto, que puede ser reclutada como tal en un nuevo lugar, tiempo o situación, tal vez mediante la mera sustitución de uno de sus componentes.

Deconstruyendo a Darwin. Javier Sampedro.

Dejando aparte, algo que ya se ha convertido en un lugar común en la investigación biológica y es la constante manifestación de sorpresa y asombro ante cada nuevo descubrimiento en el que se que manifiesta que la vida es siempre más compleja de lo que esperaban, estos párrafos nos muestran varias cuestiones que están pendientes de abordar y resolver por la ciencia ortodoxa. Como bien manifiesta Sampedro la organización de la célula en máquinas tan bien estructuradas supone una enorme restricción a los mecanismos evolutivos, y las graduales sustituciones de letras de ADN parecen menos relevantes que nunca para la generación de la novedad evolutiva. Lo más probable es que la materia prima de la innovación evolutiva no sea el gen sino la máquina en su conjunto.

El problema para el darwinismo es que eso es simplemente imposible de explicar con los mecanismos darwinianos, se exigen unos enormes milagros estadísticos para la aparición de esa gran máquina en su conjunto, que ninguna persona sensata podrá admitir. La solución que han encontrado es hablar en voz muy baja de estos temas y e intentar disimular.

Los observadores externos contemplamos el circo darwinista cada día más divertidos, viendo como hasta le crecen los enanos.

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martes, 22 de septiembre de 2009

La comadreja de Dawkins, o como hacerse trampas en el solitario



La estupidez de los darwinistas (no confundir con biólogos evolutivos) es legendaria. Unos sujetos que creen que una bacteria llega a ser un elefante aprovechando algunos errores que se producen en la copia del genoma, no pueden ser tomados en serio, pero pocas veces se ha mostrado con más claridad que a propósito del estudio de las posibilidades matemáticas de la evolución.
Ante las contundentes cifras que Hoyle y otros habían expuesto, el predicador Dawkins tuvo una genial idea que expuso en su libro "El relojero ciego". Se trata de un programa informático que tituló Weasel (Comadreja) porque el objetivo del programa es producir de forma aleatoria, la frase: Methinks it is like a weasel.


Escribe Dawkins:

No sé quién fue el primero en argumentar que, dado un espacio de tiempo lo suficientemente largo, un mono que pulsara las teclas de una máquina de escribir de manera aleatoria llegaría a escribir todas las obras de Shakespeare. Obviamente, la parte crucial de esta hipótesis es 'dado un espacio de tiempo lo suficientemente largo'. De todas maneras, limitemos un poco la tarea del mono: supongamos que no tiene que escribir las obras completas de Shakespeare, sino simplemente la frase methinks it is like a weasel ('yo creo que se parece a una comadreja'). Pongamosle las cosas aún más fáciles: el mono dispondrá de un teclado más sencillo de lo normal, con sólo las 26 teclas correspondientes al alfabeto inglés (todas mayúsculas) y la barra espaciadora. ¿Cuánto tiempo le llevaría al mono escribir esta frase?

La respuesta es:
El número de posibles secuencias, dado el alfabeto disponible, es de 27^28, o aproximadamente 10^40. La probabilidad de que el mono produzca una secuencia determinada es extremadamente reducida. Cualquier secuencia puede ser seleccionada como el objetivo, y todas ellas tienen la misma probabilidad de ser producidas que la secuencia objetivo de Dawkins, es decir, 'ME THINKS IT IS LIKE A WEASEL'.
Sería posible escribir un programa informático que replicara las acciones del hipotético mono de Dawkins, produciendo continuamente secuencias de 28 caracteres en base a un alfabeto de 26 letras y un espacio. Es fácil calcular que, incluso a una velocidad constante de varios millones de secuencias por segundo, el tiempo necesario para explorar todo el espacio de secuencias excedería con mucho el tiempo de vida del Universo.

Pero el genial Dawkins resuelve de esta forma el problema:
Introduzcamos ahora una sutil diferencia en nuestro programa. El primer paso, al igual que antes, consiste en producir una secuencia aleatoria de 28 caracteres. Pero los pasos subsiguientes no consisten en producir más secuencias aleatorias. Más bien, cada paso produce varias copias de la secuencia anterior, pero con la posibilidad de que alguna copia no sea perfecta. A los errores de copia los llamaremos mutaciones. El programa examina las copias mutantes y selecciona la que se aproxime más a la secuencia objetivo 'METHINKS IT IS LIKE A WEASEL', por pequeña que sea la mejora.
Repitiendo este proceso de selección, una secuencia aleatoria de 28 caracteres evoluciona en pocas generaciones hasta la secuencia objetivo.

Generación 1: WDLMNLT DTJBKWIRZREZLMQCO P
Generación 2: WDLTMNLT DTJBSWIRZREZLMQCO P
Generación 10: MDLDMNLS ITJISWHRZREZ MECS P
Generación 20: MELDINLS IT ISWPRKE Z WECSEL
Generación 30: METHINGS IT ISWLIKE B WECSEL
Generación 40: METHINKS IT IS LIKE I WEASEL
Generación 43: METHINKS IT IS LIKE A WEASEL


Dawkins encontró la solución: Una inteligencia que conozca el objetivo y vaya seleccionando las soluciones que más se acerquen a este. El predicador había encontrado el Diseño Inteligente.
Los razonamientos de Dawkins produjeron estupor y carcajadas que aún resuenan en los lectores objetivos ¿Cómo un fanático darwinista proponía la solución de sus adversarios para solucionar el problema?
Del lado darwinista solo se buscaron estúpidas excusas para exculpar la increíble metedura de pata del líder ideológico, pero lo cierto es que su ejemplo solo es posible admitiendo una inteligencia de la que ellos abominan ¡Vaya tropa!

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martes, 15 de septiembre de 2009

Antiamericanismo y darwinismo maduro



Los cuentos darwinistas, esos que afirman que la vida apareció en un charco templado por casualidad y que una bacteria llega a ser un elefante o una almeja aprovechando algunos errores que se producen en la copia del genoma, no tienen tanto éxito en los Estados Unidos como en la vieja Europa, allí según todas las encuestas son más escépticos en estos temas, como lo fueron con otra filosofía materialista como el marxismo que encandiló a tantos intelectuales europeos y al pueblo llano y que tanta bendición y progreso derramó por todo el continente.
Este escepticismo es atribuido por los darwinistas a la mayor religiosidad que existe en USA.

El antiamericanismo tradicional de la izquierda política en general, y marxista en particular parece que ha disminuido algo. En principio porque hay menos marxistas declarados, y el izquierdismo siente cierto consuelo tras la llegada de Obama a la Casa Blanca, pero el de los darwinistas, que en gran parte son marxistas reconvertidos aunque también los hay liberales, desde luego no.
Los Estados Unidos son su bestia negra, para ellos un país de asnos que no tiene remedio, y no se cortan ni un pelo en manifestarlo con cualquier motivo o sin él como en este caso.

La película hagiográfica sobre Darwin por supuesto va a ser exhibida en USA como es natural, era solo una noticia preventiva por si acaso, pero que sirve para que el rebaño de Paleofreak se expansione y lance sus berridos contra los Estados Unidos, algo que tienen que hacer regularmente para mantener su inestable equilibrio psicológico.
No se pierdan los comentarios de estos sujetos tan maduros.

P S
Naturalmente todo era una falsedad, pero no rectifican.
No solo el Paleofreak se desgañita, estos chiflados también dan rienda suelta a su antiamericanismo. Como dice el paranoico autor: Ya nos avisó Michael Moore.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Solo una proteína



La creación y concentración de moléculas activas puede no conducir a los organismos vivientes a menos que haya algún mecanismo que preserve y duplique las moléculas deseables con preferencia a las menos útiles. El número de moléculas posibles es enorme. Recordemos que cada proteína está constituida por una secuencia de 20 clases de aminoácidos. Una proteína de moderado tamaño puede tener 150 aminoácidos; las combinaciones posibles de las 20 clases son 10^195. Lo que es un número realmente grande; si las secuencias de aminoácidos de una proteína prebiótica se produjeron por procesos aleatorios, no sería esperable que se produjese ninguna proteína determinada de esta longitud en la Tierra. Se estima que el número de estrellas en el universo es aproximadamente 10^22. Si cada una de estas estrellas tuviese un planeta en el que la síntesis prebiótica produjese mil millones de proteínas diferentes de 150 aminoácidos por segundo durante cinco mil millones de años, se producirían aproximadamente 7,8x 10^25 combinaciones de aminoácidos: billones sobre billones resumen el total de combinaciones posibles. La probabilidad de descubrir una combinación particular de 150 aminoácidos por azar, sería a pesar de eso mínima.

Desde el origen del planeta hasta el origen de la vida en la Tierra transcurrieron sólo mil millones de años o menos. Debemos concluir que, o bien las proteínas particulares que existen en la tierra no se originaron por procesos al azar, o bien que las secuencias de muchos aminoácidos conducirían a proteínas biológicamente aprovechables, de manera que las que aparecieron representan sólo uno de los muchos miles de millones de posibles grupos de proteínas que podrían formar las bases de los seres vivos.

Tomado de "La selección en acción"de F.J. Ayala y J.W. Valentine.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Por la bocaza injuriadora murió el besugo

Parece que las aguas han vuelto a su cauce, y este sujeto ha sido despedido cuando la Cope ha visto a la clase de besugo que habían contratado sin saber quién era.
Me siento muy satisfecho de haber levantado la pieza, pero todavía me parece increíble que el sujeto pretendiera trabajar para quienes había injuriado y despreciado con tanta saña. Menudo peje.

Esta era la entrada anterior:

¿Se han vuelto locos los Obispos españoles?

Suelo visitar de cuando en cuando algunas Páginas cientifistas para ver como anda el ambiente. La del fanático Javier Armentía: "Por la boca muere el pez", solo de tarde en tarde porque aunque darwinista por supuesto, el sujeto no trata especialmente temas evolutivos. Tiene como principal ocupación, el ataque con saña inigualable a la religión en general y a la Iglesia Católica en particular. Hoy cuando después de mucho tiempo aterrizo en el sitio, casi me caigo de espaldas a pesar de estar sentado.
Armentía ha sido contratado por la cadena radiofónica de la Iglesia COPE en el programa La mañana. Al principio pensé que se trataba de una broma para atacar a la religión como suele, pero no, era cierto.
El sujeto es un militante ateo a tiempo completo con una obsesión patológica por la Iglesia Católica.
No creo que en toda la blogosfera en español, haya nadie que destile un odio tan enfermizo contra la religión y contra la Iglesia como este perturbado. Alguien podría igualarlo, pero es imposible superarlo. No se quita de la boca a los obispos a los que insulta continuamente, en particular a los Monseñores Rouco y Cañizares. Contra este último, después de insultar al Papa y a la Iglesia, pedía hace poco que actuara la fiscalia por unas declaraciones, que naturalmente el porcinesco Armentía tergiversa.
Aquí tienen una muestra de como se las gasta el científico:



Pero resulta que leo que uno de los príncipes de la dictadura vaticana (ministro le llaman ahora a este lugarteniente del dictador Razinger... -nota bene: tanto interés que tienen algunos en hacer notar que ciertos dirigentes de ciertos países son dictadores, y siempre se olvidan de que el Vaticano no es menos dictadura por ser católica-), el archiconocido villano que hizo sus desmanes en la curia española con su sede en Toledo, el tal Antonio Cañizares, disparaba el otro día con unas declaraciones alucinantes, de esas que exigirían públicas manifestaciones delante de los templos católicos y, cuando menos, una directa condena al ostracismo social de quienes no se desmarquen de esas terroristas afirmaciones. Que actúen la fiscalía y todos esos sabios de las leyes tan celosos cuando se trata de impugnar o ilegalizar opciones políticas que no condenan la violencia, y hagan lo propio con quien dice tal


Como si se tratase de Drácula ante un crucifijo, al sujeto se le salen los ojos de las órbitas y la baba por las comisuras cuando se le nombra a Dios, y sin embargo está muy contento del contrato y acepta encantado el dinero episcopal y sabe que ha metido un gol por toda la escuadra a la Iglesia que no tendrá más remedio que despedirlo cuando se enteren sus dirigentes lo que vomita constantemente el tipo.
Alguien puede pensar que exagero, y que la cita anterior es una excepción, si es así pueden echar un vistazo aquí, aquí donde pueden ver su cara de lechoncito satisfecho, o aquí
o este comentario


¿Quién asesora a la Iglesia española? Sin duda un enemigo, pero el enemigo más feroz y rabioso que se pueda imaginar. Peor imposible.

lunes, 31 de agosto de 2009

Endosimbiosis y darwinismo



Uno de esos profesores universitarios que pululan por aquí, decía hace poco, para demostrar que no era un dogmático neodarwinista, que ellos, hasta admitían la endosimbiosis.

A la fuerza ahorcan ¡Qué otra cosa pueden hacer! La evidencia termina por imponerse, a pesar de la censura y las trabas de todo tipo que tiene que soportar cualquier dato que afecte negativamente a la doctrina darwinista.

Con la endosimbiosis ha sucedido como con la Explosión Cámbrica, primero se intenta ignorar hasta donde se pueda, después se procuran minimizar los daños y siempre confundir y enredar. Y es que la endosimbiosis además de una realidad biológica incuestionable es un torpedo certero que ha hecho diana en la linea de flotación de la absurda teoría neodarwista, y cuando se sacan todas las consecuencias lógicas de lo que supone, esta se ve como lo que es, una infinita estupidez sin ninguna relación con la realidad que nos muestran los hechos.

El mayor paso evolutivo después de la aparición de la vida, el paso de la célula procariota a la euariota con núcleo diferenciado no se produce por mecanismos darwinistas sino por fusión, ensamblaje o acoplamiento de varias pequeñas procariotas, para formar una gran eucariota, la célula que tienen todos los seres pluricelulares, los animales y las plantas.

Como afirma Javier Sampedro, ¡y cuanta razón tiene! "Las bacterias en un sentido nada trivial son los seres vivos más evolucionados de la Tierra, no solo porque llevan aquí más tiempo que nadie, sino también porque su enorme eficacia energética, su gran adecuación a todo tipo de medios, su inmensa variabilidad y la espectacular compresión de la información - ningún artilugio existente puede empaquetar tantos bits de información en un espacio tan exiguo- las convierten en las máquinas biológicas mas engrasadas, más versátiles y las mejor adaptadas que conocemos."

Y como afirma Margulis las bacterias podrían considerarse una especie única, sus tipos cambian con fluidez y rapidez. Comparado con los animales y las plantas, el repertorio metabólico de las bacterias es inmenso.

No hay intermedios evolutivos entre procariotas y eucariotas, o se es una bacteria o un eucariota.

Este tipo de transiciones evolutivas aparentemente bruscas, sin evidencias de transición gradual, sin intermediarios que tengan representantes actuales y que ocurren una sola vez en la historia, son justamente la bestia negra del darwinismo.

Lo que piden estos sucesos a nuestra buena fe no es ya que creamos que una melodía dodecafónica se puede transformar sin ayuda externa en El concierto de Aranjuez, es que encima nos tenemos que creer que se transforma en él prácticamente de repente.
Javier Sampedro.

A Margulis le costó trabajo la publicación de su tesis revolucionaria, la endosimbiosis serial. El manuscrito fue rechazado quince veces por diversas revistas antes de ser publicado y fue ignorado después. Unos años más tarde, el prestigioso y fanático darwinista Max Taylor formuló una teoría llamada de "filiación directa", lo que todo el mundo había supuesto hasta entonces, Taylor lo formalizó vagamente, es decir la evolución gradual por pequeños pasos desde una bacteria a una eucariota. Como afirma Sampedro, "la teoría de Taylor supone un buen ejemplo de la resistencia heroica del neodarwinismo a aceptar cualquier cosa que no encaje en sus preconcepciones".
Un "heroísmo"inutil y ridículo, por supuesto.

Después de los trabajos de Gupta, aunque haya zonas controvertidas, la verdad se impone, y a pesar de que algunos científicos de prestigio siguen luchando contra la verdad radical que supone la endosimbiosis, y tratan de decir que sí, que las mitocondrias y los cloroplastos provienen por simbiosis de bacterias de vida libre (eso es incontrovertible) pero que la asociación se produjo por un mecanismo casual, algo así como que una célula se comió a otra y no la digirió. Engullen dicen los tipos: un tiburón se comió a Caperucita y surgió una sirenita u otra estupidez por el estilo.

No pueden ver la verdad que se muestra: la evolución se produce porque en el "programa vida" se acoplan programas genéticos previos independientes, para producir con su fusión, con su ensamblaje, seres más grandes, pero no más complejos, solo lo son aparentemente.

El ensamblaje de seres vivos no puede tratarse de algo casual, cuando dos o más complejísimas maquinarias biológicas se unen y no solo siguen funcionando a la perfección sino que forman otra "mas evolucionada", solo puede ser porque funciona un programa inteligente previo. Eso lo saben o lo intuyen los doctrinarios y hacen lo que pueden para la persistencia de la decimonónica ideología materialista-darwinista, pero solo podrán retrasar algún tiempo que resplandezca la verdad, nuevas pruebas del ensamblaje por diseño surgen sin cesar.

domingo, 16 de agosto de 2009

Afirmaciones extraordinarias requieren demostraciones extraordinarias



Existe una famosa sentencia, aplicable en ciencia y en cualquier área de conocimiento: afirmaciones extraordinarias requieren demostraciones extraordinarias.

La afirmación más extraordinaria que jamás se ha hecho, y que ha sido considerada como científica, es que la vida apareció por casualidad en una sopa templada o calentita, o en cualquier caso por azar.

Esa extravagante idea, lo era menos en tiempos de Darwin cuando la célula era solo "una unidad uniforme de protoplasma", con el avance de la ciencia se han descubierto dentro de ella, las más extraordinarias y complejas máquinas jamás imaginadas y las dificultades para explicar su aparición han aumentado de una forma exponencial. De tal manera que sostener hoy en día que ese "programa biológico"es fruto de la casualidad o de alguna otra de las estrafalarias explicaciones que nos ofrece la ideología darwinista es simple y llanamente una locura.

Ante esta situación los darwinistas, afirman con la boca pequeña, que el problema de la aparición de la vida es algo distinto de la evolución de esta, y que hay que separarlos tajantemente, y a la supuesta ciencia que estudia la aparición de la vida celuar, la llaman abiogénesis, o generación espontánea. Ya con una procariota formada, esta evoluciona hasta llegar a ser un elefante o una almeja y eso si lo explica al parecer la teoría la teoría neodarwinista.

En mi opinión esta diferenciación es una estafa intelectual, para poder seguir sosteniendo lo insostenible durante algún tiempo más. La evolución prebiológica y la biológica, deben ser estudiadas conjuntamente para poder comprender la vida. Nada tiene sentido en la biología si no es a la luz de la evolución.

El argumento de Paley, tiene hoy mucha más vigencia que cuando se formuló hace dos siglos, infinitamente más. Si alguien encuentra un reloj aún cuando no sepa para lo que sirve, la compleja configuración de las partes nos lleva a concluir que han sido diseñadas con un propósito por una inteligencia. Hoy vemos más y más complejidad irreductible en la vida, ya no sería un reloj, hoy serían los más complejos artefactos fabricados por el hombre, los que tendríamos que comparar de forma desventajosa con el programa vida.

Los ventajistas estafadores darwinistas siguen afirmando que la hipótesis filosófica más parsimoniosa es el azar y que está prohibido invocar cualquier tipo de inteligencia. Ambas afirmaciones son falsas y nada razonables, y son fruto de un materialismo filosófico que quiere imponerse como obligatorio. El azar exige cada vez más y más milagros, hasta un punto realmente ridículo, pero creen con gran fe en ellos porque son milagros materialistas. Cualquier estupidez, cualquier locura vale antes de reconocer lo evidente, que la vida es producto de una inteligencia.



Anthony Flew, el más famoso filosofo ateo del Reino Unido durante décadas, tuvo la honradez intelectual de rendirse a la evidencia, cuando vio lo que significaba la complejidad de la vida:

Mi propia idea de que la complejidad integrada de la vida misma –que es mucho más compleja que el universo físico- solo puede ser explicada en términos de una fuente inteligente. Creo que el origen de la vida y de la reproducción sencillamente no pueden ser explicados desde una perspectiva biológica, a pesar de los numerosos esfuerzos para hacerlo. Con cada año que pasa, cuanto más descubrimos de la riqueza y de la inteligencia inherente a la vida, menos posible parece que una sopa química pueda generar por arte de magia el código genético. Se me hizo palpable que la diferencia entre la vida y la no-vida era ontológica y no química. La mejor confirmación de este abismo radical es el cómico esfuerzo de Richard Dawkins para aducir en El espejismo de Dios que el origen de la vida puede atribuirse a un “azar afortunado”. Si este es el mejor argumento que se tiene, entonces el asunto queda zanjado.

[...]

Creo que los orígenes de las leyes de la naturaleza, de la vida y del universo señalan claramente a una fuente inteligente. La carga de la prueba recae sobre los que argumentan lo contrario.


Esta última afirmación de Flew, que conoce bien el paño, pone histéricos a los fanáticos cientifistas-darwinistas, pero antes o después tendrá que aceptarla la comunidad científica, eso es algo inevitable, no se puede seguir aumentando los milagros hasta el infinito.

Todos esfuerzos de estos fanáticos van dirigidos a intentar ridiculizar o demonizar a quién les diga alguna de estas verdades. Quieren permanecer anclados en una filosofía materialista decimonónica, incompatible con el avance de la ciencia.

sábado, 15 de agosto de 2009

Somos monos, solo monos. Máquinas, autómatas programados, lerdos robots




Los darwinistas repiten siempre como loros: el hombre no es más que un mono, solo un mono o las frases de Dawkins:

Somos máquinas de supervivencia, autómatas programados a ciegas con el fin de perpetuar la existencia de los egoístas genes que albergamos en nuestras células.


O también:

Si como la mayoría de los críticos de mi pasaje del robot torpe, no es usted religioso, se enfrentará al siguiente interrogante ¿Qué diablos cree usted que es sino un robot, aunque un robot muy complejo?


Solo o no más que monos, máquinas o lerdos robots ¿Por qué ese empeño obsesivo, como han podido ver en debates anteriores? La cuestión es degradar al ser humano, para así poder manipularlo sin control, ya que ha perdido toda su dignidad.

El cientifismo-darwinismo, que es una ideología totalitaria que está impregnando a la sociedad a base de mentiras e hipocresía, se cree con el derecho a imponer esta ideología de forma obligatoria y tambien a introducirse en cualquier espacio de la sociedad y practicar cualquier tipo de ingenieria social.

Estos perturbados piensan que ellos son "la ciencia", y si han visto"la verdad"tienen todo el derecho a reformar todos los ámbitos de la vida con arreglo a su ideología y las mentes de los disidentes. Con sus constantes predicaciones intentan madurar la situación para que sea posible realizarlo sin gran resistencia. Si piensan que exagero, les invito a la lectura de Daniel Dennett o Richard Dawkins, los más populares predicadores cientifistas, su primera obsesión es acabar como sea con todo sentimiento religioso ¿Algo que ver con la reproducción diferencial o los cladogramas? No, eso no.

Richard Weicart escribe en referencia a estas cuestiones, un interesante artículo que comienza con estas lúcidas reflexiones de un famoso psiquiatra y neurólogo:


Victor Frankl un sobreviviente del Holocausto que sufrió los horrores de Auschwitz, realizó inteligentes observaciones sobre la forma en que el pensamiento europeo moderno ha ayudado a preparar el camino para atrocidades nazis (y su propia miseria). Afirmó, "Si presentamos un hombre con un concepto de hombre que no es cierto, podemos corromperlo. Cuando se presenta al hombre como un autómata de reflejos, como una mente-máquina, como un manojo de instintos, como un peón de los impulsos y las reacciones, como un mero producto del instinto, la herencia y el medio ambiente, alimentamos el nihilismo al que el hombre moderno es, en cualquier caso, propenso. Me familiaricé ", continúa Frankl," con la última etapa de esta corrupción en mi segundo campo de concentración, Auschwitz. Las cámaras de gas de Auschwitz fueron consecuencia última de la teoría de que el hombre no es sino el producto de la herencia y el medio ambiente - o, les gustaba decir a los nazis, de la sangre y el suelo. Estoy absolutamente convencido de que las cámaras de gas de Auschwitz, Treblinka, Maidanek y, no se prepararon en última instancia, en algún ministerio en Berlín, sino más bien en las mesas y en las aulas de los científicos y filósofos nihilistas."

martes, 11 de agosto de 2009

"Solo unas bases" son treinta millones de pares, o todo está permitido




Jose María Hernández, ilustre visitante de esta Página, suele hacer sorprendentes afirmaciones, hoy voy a comentar las últimas(7 agosto 0:28) que vierte en este mi pequeño blog y enlaza con el suyo, para regocijo de ocasionales lectores.

Un personaje que es capaz de afirmar que sesenta millones de bases nitrogenadas son tan solo unas bases, es alguien que ha perdido cualquier contacto con la realidad. La costumbre de exagerar y mentir con total impunidad está tan arraigada que no percibe ya la estúpida mentira. Al comunicarse solo dentro de la secta que no replica a estas barbaridades ha ido subiendo progresivamente el tono de las falsedades y llegamos a estos extremos. Si alguien dentro de la grey darwinista le hubiese advertido antes que tan burdas mentiras pueden ser percibidas por algún lector imparcial y desprestigiar así lo que se pretende ciencia objetiva neodarwinista, y de paso alegrar la vida a los anti, quizás no hubiesen llegado a hacer aseveraciones tan ridículas. Pero no, no lo hacen, todo está permitido si es por el bien de la causa.
Que Hernández y otros predicadores del mismo estilo pasen por este apartado rincón de la blogosfera en su afán proselitista trae mutuas ventajas: ellos entran algo en contacto con la realidad que ignoran y yo me divierto con tan ilustres visitantes.
¿Mutualismo? ¿Comensalismo? Que sigan viniendo.

-Papá dame dinero.
-No hijo que te lo gastas
-Tan solo unos leuros
-Vale ¿Cuánto?
-Tan solo treinta o sesenta millones.
-Tú eres gilipollas.
-Eso es solo el 0,001 del PIB
-Ah bien, en ese caso toma treinta y mañana te doy el resto.

He sido citado por el predicador desmedido Hernández como profeta aneuronado. No hace falta decir que estoy encantado. Que landran y cabalgamos.

lunes, 3 de agosto de 2009

Por qué queremos a Gould



En este blog se intenta explicar la popularidad de Stephen Jay Gould entre los antidarwinistas, en mi opinión no lo consigue. Intentaré exponer las que considero las verdaderas razones de esa popularidad.

Gould es un autor muy prolífico, creo haber leído toda su obra divulgativa, sus más importantes artículos técnicos y su obra magna: La estructura de la teoría de la evolución enterita y subrayada. Confieso esto último para que se vea hasta que grado de excentricidad puede llegar un forofo del tema evolutivo.
SJG tiene un estilo barroco, enrevesado y farragoso, con algunas frases incompresibles, absurdas metáforas y disquisiciones tan interminables como sus conocimientos. Su estilo, creo que ha ido empeorando con el tiempo. Quien no lo haya leído, no puede hacerse una idea. Aquí un ejemplo en un libro abierto al azar:

La escala y el cono: iconografías de progreso

La familiaridad ha estado criando más tiempo que el reglamentario en nuestros lemas, produciendo de todo, desde desprecio (según Esopo) hasta niños (como observó Mark Twain). Polonio, en el curso de sus locuaces delirios, urgía a Laertes a buscar amigos que fueran seguros y fieles, y después, habiendo escogido bien , a "agarrarlos" a a su "alma con aros de acero".

Pero como el asesino eventual de Polonio afirmó en el más famoso soliloquio de todos los tiempos , "ahí está el problema". Esos aros no son fáciles de desatar y lo que es confortablemente familiar se convierte en una prisión del pensamiento.

Las palabras son nuestro medio favorito de dar fuerza al consenso; nada inspira tan bien la ortodoxia y la unanimidad de la acción dirigida a un fin como una divisa bien construida: "¡Que gane el mejor!", y "Que Dios derrame sobre ti su gracia!". Pero nuestra reciente invención de la palabra no puede ocultar una herencia anterior. Los primates son animales visuales por excelencia, y la iconografía de la persuasión nos llega aún más cerca del alma de nuestro ser que las palabras. Cualquier demagogo, cualquier humorista, cualquier ejecutivo de publicidad ha conocido y ha explotado el poder evocativo de una imagen bien escogida.


La cita es demasiado larga pero no podía parar antes porque el lector pensaría que estoy haciendo trampa. Sin más comentarios por mi parte, se admiten exégesis por parte de los ocasionales lectores de estos párrafos.

Gould era un adorador de Darwin. Si quería que algo cambiase en el darwinismo era con la intención de poder salvar lo esencial, pues él al contrario que otros veía la realidad de la doctrina.
Sugiero la lectura de las secciones Darwiniana de El pulgar del panda y Desde Darwin para ver el alcance de su fervor. Siendo un darwinista fervoroso, con un estilo digamos que complejo ¿Cómo es que tiene tantos lectores antidarwinistas?

La razón es bien sencilla, Gould no escondía debajo de la alfombra los temas delicados para la doctrina, al menos no de forma sistemática como otros muchos, y a veces los exponía en sus escritos.

Veamos ejemplos:
En el tema de la tautología y el contenido informativo de la teoría, tan del agrado de los darwinistas Gould escribía ya en el año 77:

Muchas grandes teorías se sostienen por medio de cadenas de dudosas metáforas y analogías. Bethell ha identificado correctamente la basura que rodea la teoría evolutiva. Pero diferimos en un aspecto fundamental: para Bethell, la teoría darwiniana está podrida hasta lo más hondo; yo encuentro en ella una perla de valor incalculable.

Hay muchas citas de ese estilo, pero solo voy a hacer mención de las del capítulo 10 de La estructura de la teoría de la evolución, allí hay frases como estas, parte de un relato extraordinario. que sin duda muestra a cualquiera que la evolución, no es el cuento darwinista sino algo muy distinto:

-La idea de que las novedades morfológicas deben "aguardar"la provisión de nuevo material genetico por duplicación (o algún otro proceso) ha quedado invalidada por el fascinante descubrimiento de que los principales genes Hox de los artrópodos ya estaban presentes antes de la separación de las clases artrópodas y , ya puestos, de los prostotomos.

- En cualquier caso, un mínimo de 7 y un máximo de 10 o más proporcionan un amplio respaldo a la conclusión clave de que ya habia evolucionado un complejo Hox entero antes de que se establecieran los rasgos distintivos de los principales Baupläne bilaterales.

-Al menos tres fuentes de evidencia subrayan la conclusión central de esta sección: que la evolución de Baupläne diferenciados y especializados a partir de un ancestro común presumiblemente homólogo procede por reducción y restricción y no por adición de genes o expansión de sus dominios de actividad.

-El ancestro común de las 40.000 especies de gnatostomos modernos ya tenía cuatro juegos Hox, y solo un puñado de especies agnatas tiene menos entre los vertebrados actuales. Esto quiere decir que nuestro gran clado de 40.000 especies evolucionó según la regla general presentada en esta sección: la correlación de la especialización fenotípica con supresión de restricción de la actividad Hox. O POR DECIRLO MAS GRÁFICAMENTE, UNO EMPIEZA CON TODO LO QUE PUEDE TENER Y VA "RESTANDO" A PARTIR DE AHÍ.

Es un hecho cierto y demostrado que la evolución empieza hasta donde conocemos con TODO LO QUE SE PUEDE TENER, y la evolución morfológica se va produciendo restando, suprimiendo o inactivando material genético. Este es el nuevo secreto profesional de la genetica, Gould al menos tuvo la decencia de exponerlo con cierta claridad, aunque es un golpe mortal a la fantasías darwinistas. Ni él ni nadie dentro del dogma puede dar un explicación plausible a esta pauta evolutiva real ¿Hasta cuando este extraordinario descubrimiento permanecerá solo en círculos superespecializados? ¿No tiene el publico culto derecho a conocer tan extraordinario descubrimiento?
No, porque es un golpe mortal al dogma darwinista.

Por eso los antidarwinistas apreciamos a Stephen Jay Gould.

lunes, 27 de julio de 2009

Tautologías y logomaquias darwinistas



Los darwinistas algunas veces responden a las acusaciones contra su doctrina en vez de ignorarlas como sucede la mayor parte de las veces. Cuando esto ocurre es que se sienten fuertes y creen que pueden contraatacar con cierta coherencia. Pero al moverse siempre dentro de la secta, y solo frecuentar las fuentes favorables, estas respuestas adolecen de consistencia y se desmoronan al mínimo contacto con la realidad.
El Naturalista Revolucionario nos explica con la ayuda de un tal Steve Harnard por qué el principio ¿enunciado? de la selección natural no es tautológico.
Creo que tanto Fedor como Popper no califican al principal enunciado de la doctrina como tautológico -Popper llegó a afirmar que era casi tautológico- pero lo que sí aseguran es que no tiene contenido empírico, ni valor predictivo y que el contenido informativo de la teoría es banal.
¿Qué otra cosa se puede deducir de "la supervivencia de los más aptos", sino que sobreviven los que sobreviven, siendo estos los más aptos por definición?
Para Harnard esta estúpida banalidad se convierte gracias a la siempre divertida logomaquia de estos charlatanes darwinistas en "una especie de requisito ontológico"y ya ontológicamente se puede se puede seguir cuesta abajo y mentir con un descaro tan grande que solo es concebible cuando se está seguro que habla solo para los ignorantes sectarios:

El éxito metodológico del PSN (leasé darwinismo) queda ampliamente certificado por 1) el hallazgo de los mecanismos de la herencia, que propician la maduración de la teoría genética a partir de Mendel y 2) el fructífero programa de investigación que intenta explicar lo qué ocurría en los ambientes ancestrales para que unos rasgos fueran transmitidos con más éxito que otros.


"el hallazgo de los mecanismos de la herencia, que propician la maduración de la teoría genética a partir de Mendel", no tiene nada que ver con el imaginado éxito metodológico del darwinismo, muy al contrario, los mecanismos de la herencia mendeliana tan evidentes y tan científicamente comprobables, nunca casaron con la fantasía darwinista. Mendel predice la estabilidad. Desde su redescubrimiento a principios del siglo XX, hasta su integración con calzador con el darwinismo para producir la"nueva síntesis"pasó medio siglo y se realizaron las contorsiones lógicas más espectaculares jamás vistas solo para concluir según ellos que no es totalmente imposible teóricamente el progreso evolutivo darwiniano en unas circunstancias muy especiales y tras múltiples hipótesis "ad hoc" para salvar la implacable ley de Hardy-Weinberg.

Ese supuesto programa de investigación que intenta explicar lo que "ocurría en los ambientes ancestrales para que unos rasgos fueran transmitidos con más éxito que otros", es pura fantasía, no existe, solo elucubraciones más o menos disparatadas. El darwinismo siempre ha sido y sigue siendo un obstáculo para el avance de la ciencia.

La triste verdad para los darwinistas es que con términos como aptitud, adaptación y esas monsergas, solo puede sobrevivir la estupidez más palmaria, que siempre ha estado bien adaptada a la condición humana.

lunes, 20 de julio de 2009

La inteligencia en el Universo, un descubrimiento de la ciencia.



Copio aquí el final de La caja negra de Darwin. Behe después de habernos abrumado con las pruebas del diseño inteligente que nos muestra la bioquímica, y que cualquier persona interesada debería leer, para no hacer el rídiculo con citas de adversarios cuyos argumentos han sido aplastados por el autor.
El reconocimiento del Diseño Inteligente se puede retrasar, pero si se niegan a ver lo evidente, los recalcitrantes que tengan conocimientos de biología, cada vez se alejarán de la realidad y entrarán en el delirio como ya se ve en algunos casos. Es inevitable.

Behe concluye:


MARCHA HACIA LA EXTRAÑEZA

La renuencia de la ciencia a abrazar la inferencia del diseño inteligente que sus largos y costosos trabajos han vuelto manifiesta no tiene fundamento. El chovinismo científico es una emoción comprensible, pero no debería afectar a cuestiones intelectuales serias. La historia de las escaramuzas entre religión y ciencia es lamentable y ha causado rencores por doquier. La furia heredada, sin embargo, no es base para efectuar juicios científicos. El argumento filosófico (planteado por por algunos teístas) de que la ciencia debería eludir teorías donde se huela un elemento sobrenatural es una restricción artificial sobre la ciencia. El temor de que las explicaciones sobrenaturales abrumen la ciencia es infundado. Más aún, el ejemplo de la teoría del Big Bang muestra que teorías con ramificaciones sobrenaturales pueden ser muy fructíferas. El compromiso filosófico de ciertas personas con el principio de que no existe nada más allá de la naturaleza no debería interferir con una teoría que surge naturalmente de los datos científicos observables. Los derechos de estas personas a eludir una conclusión sobrenatural se deben respetar escrupulosamente, pero su aversión no debe ser un determinante.

Al llegar al final de este libro, no nos queda ninguna defensa sustantiva contra lo que parece una extraña conclusión: que la vida fue diseñada por un agente inteligente. En cierto modo, sin embargo, todo el progreso de la ciencia en los últimos siglos ha sido una marcha continua hacia la extrañeza. Hasta la Edad Media la gente vivía en un mundo natural. La Tierra estable se hallaba en el centro de las cosas; el Sol, la Luna y las estrellas giraban sin cesar para alumbrarnos día y noche; desde la antigüedad se conocían las mismas plantas y animales. Había pocas sorpresas.

Entonces se postuló, absurdamente, que la Tierra se movía, rotando mientras giraba alrededor del Sol. Nadie podía sentir la rotación de la Tierra; nadie podía verla. Pero rotaba, en efecto. Desde nuestra perspectiva moderna, es difícil comprender el ataque contra los sentidos que protagonizaron Copérnico y Galileo, en definitiva, estaban afirmando que la gente ya no podía confiar en el testimonio de sus ojos.

Las cosas empeoraron con los años. Con el descubrimiento de los fósiles fue evidente que los conocidos animales del campo y el bosque no siempre habían estado en la Tierra; en una época el mundo había sido habitado por criaturas enormes y extravagantes que habían desaparecido. Tiempo después Darwin sacudió el mundo al argumentar que las especies conocidas derivan de esas formas de vida extravagantes y desaparecidas, en principio incomprensibles para la mente humana. Einstein nos dijo que el espacio es curvo y el tiempo es relativo. La física moderna dice que los objetos sólidos están constituidos principalmente por espacio, que las partículas subatómicas no tienen posición definida, que el universo tuvo principio.

Ahora le toca a la fundamental ciencia de la vida, la bioquímica moderna, cumplir ese papel perturbador. La simplicidad que en un tiempo se consideraba el fundamento de la vida ha resultado ser una fantasmagoría; en cambio, sistemas de intrincada e irreductible complejidad habitan la célula. La resultante comprensión de que la vida fue diseñada por una inteligencia constituye una una conmoción para nosotros, en el siglo veintiuno, porque nos hemos acostumbrado a pensar que la vida deriva de simples leyes naturales. Pero otros siglos han tenido sus conmociones, y no hay motivos para suponer que nosotros escaparíamos de ellas. La humanidad supo resistir el hecho de que el centro del firmamento se desplazara de la Tierra hasta más allá del Sol, que la historia de la vida se expandiera hasta incluir reptiles muertos millones de años atrás, que el universo eterno pasara a ser mortal. También resistiremos la apertura de la caja negra de Darwin.

domingo, 19 de julio de 2009

Darwinismo, más y más miseria.



Es tradicional en las páginas darwinistas practicar la censura a las opiniones discrepantes, eso es algo sabido y asumido, aún cuando la proporción de participantes darwinistas y anti, sea de cincuenta a uno. Nunca se sienten seguros. Si esta Página ha llegado a existir, ha sido por ser silenciado en prácticamente todos los foros evolutivos en los que participé. En alguno de estos foros han llegado a estar más de veinte participantes reafirmándose unos a otros con docenas y docenas de mensajes, sin ningún adversario, al haber sido silenciado hacía días. Un espectáculo realmente divertido.

Como digo todo esto es normal, pero ahora la cuestión ha alcanzado otros niveles, la costumbre se ha extendido a revistas científicas que gozaban de merecido prestigio y que jamás habían realizado estas arteras practicas, pero la enorme estafa darwinista está comenzando a ser desenmascarada y muchos de los que podían permitirse el lujo de la apariencia de imparcialidad y de estar por encima de los que realizan estas acciones tan poco justificables, ahora han tenido que enfangarse y llevar acabo los mismos reprobables usos.
La miseria del darwinismo se extiende y alcanza ya a todos los doctrinarios, tienen que caer muy bajo, los que aparentemente están muy alto, para poder seguir defendiendo tantas estupideces.

Las revistas Trends in Microbiology y nada menos que Science han publicado artículos en los que se cita reiteradamente a Michael Behe. Naturalmente estas citas son para ponerlo a caldo. Antes simplemente lo ignoraban, pero ahora les es imposible permanecer callados sobre el elefante en el salón, y hablan y hablan de él y sus teorías, pero no consienten la publicación no ya de un artículo de réplica, ni una escueta nota del aludido se permite. Esto era antes moralmente obligatorio, pero la degradación bate récord día a día. Buenos síntomas, sin duda.
La miseria del darwinismo, cada vez más evidente.